El Mogreb
Atribuido a Tetuán, estanque de despropósitos.

El fútbol genera cultura e incultura, genera turismo y muchas
cosas más, todas ellas buenas. Por ello, el fútbol moderno se rige por sistemas
modernos ya sean a nivel comercial como burocrático.
El Mogreb,
desgraciadamente, no posee esas perspectivas por estar en manos de un grupo
nombrado dedocráticamente... y hacen lo que saben -tal vez, con la mejor
intención del mundo- pero, no son las personas indicadas para llevar un club de
altos vuelos.
El desconocimiento de lo que actualmente se maneja, incluso
en equipos inferiores, está estancando al Mogreb en un hoyo del que poco o nada
se puede hacer. No basta el corazón, no basta la palabrería hueca, no basta
encerrarse y quedar ajenos a la ciudad y al fútbol como institución.

Pero los despropósitos de nuestra directiva no son nuevos en
lo que respecta a los entrenadores y sus contratos, que son varios y a los
cuales no me voy a referir ahora exceptuando los dos últimos despidos:
El entrenador de los porteros fue cesado hace pocas fechas,
antes de empezar la temporada. ¿Porqué se le contrató semanas antes si se le
iba a echar?

Del tema de los jugadores sería preferible no hablar. En un
año solar se fueron del Club unos quince jugadores, fichando a otros sin
equipos o carentes de calidad por su edad o por sus limitaciones.
Este es el triste panorama que nos ofrece el Mogreb de
nuestros amores. Un Club que se autodenomina “profesional” pese a que de esto,
da la impresión, no tiene absolutamente nada.
Ahmed Mgara